Una historia de amor donde nada es lo que parece donde hay que renunciar a todo por el bien del ser amado, pero sobre todo por salvar a la humanidad

lunes, 9 de septiembre de 2013

Capitulo 5: Transformación

Sabía que nos tenía que hacer la pregunta pero no estaba segura de querer oírla y menos todavía de tener que dar una respuesta definitiva 

- Si aceptamos- dijimos Alex y yo al unísono

- Esta bien, tenéis que pasar a la sala que se encuentra a continuación- dijo mientras señalaba el otro lado de la habitación- una vez entréis debéis poneros espalda contra espalda con el cuerpo completamente relajado y los ojos cerrados luego ya os avisaré cuando podéis salir.

Tras aquellas extrañas indicaciones me situé junto a Alejandro y los dos tendimos nuestras manos hacia el otro hasta que estuvieron completamente entrelazadas me yo busqué su mirada llena de dudas y enseguida me la devolvió pero llena de confianza y esperanzadora, ahora si que estaba preparada para lo que viniera.

Nos dirigimos sin vacilar más a la sala que nos había indicado y en cuanto estuvimos frente a la puerta nos fijamos en la inscripción que había encima de esta que rezaba: Amor, ayuda y amistad, al parecer una ver convertidos esos eran nuestros cometidos. Empujé suavemente  la puerta con la mano que me quedaba libre, entramos y nos situamos justo en el centro.

- Bueno llegó la hora- dijo Alex intentando quitarle importancia

- Si- dije con la sonrisa más falsa que había utilizado en toda mi vida

- Todo saldrá bien- este me atrajo hacia si y me estrechó entre sus brazos a la vez que me acariciaba la espalda en señal de apoyo. Si hubiera podido me hubiera quedado toda la vida así, aunque tecnicamente íbamos a estar todo lo que nos quedara de vida allí.

Nos colocamos tal y como Daniel nos había ordenado y enseguida empecé a notar como una ola de calor se extendía por todo mi cuerpo, las manos de Alex y las mías se rozaban y una sacudida me recorría todo el cuerpo hasta que noté la nuca ardiendo, como si me clavaran un cuchillo afilado, hasta que ese intenso dolor se desvaneció y me comenzaron a escocer los ojos.

No sabía cuanto tiempo había pasado hasta que de nuevo abrí los ojos y volvía a estar acostada en mi cama, recorrí toda la habitación en busca de Alex o de Daniel y pude ver a este último sentado en una silla a los pies de la cama.

- Ya era hora

- ¿Q-que ha pasado?

- Una vez completada la transformación tu y Alejandro os habéis desmayado, en cuando pude entrar os llevé a vuestras camas

- ¿Pero el está bien?

- Si, el solo ha tardado un par de minutos en reponerse, pero tu en cambio llevas unas dos horas inconsciente

Me sentí un poco mal, no por haberme desmayado sino por que Daniel tenía un deje de reproche en su voz por ello, como si esperara que a mi no me fuera a pasar. Me levanté lentamente ya que al incorporarme me dio un pequeño mareo y me dirigí hacia el cuarto de baño para beber un poco de agua. Al levantar la cabeza para mirarme al espejo pude comprobar que mis ojos ya no eran del mismo color que antes ahora conforme te ibas acercando a la pupila se iban volviendo de un violeta intenso, creí que estaba alucinando y parpadeé varias veces para intentar despejarme pero me di cuenta de que no, mis ojos de verdad habían cambiado.

Salí del cuarto de baño apresuradamente y fui directa al cuarto de Alex, al entrar lo encontré sentado en una silla revolviéndose el pelo en señal de preocupación, ¿estaría preocupado por mi?.

- Claro que estaba preocupado por ti, si no te despertabas- dijo alzando la voz

-¿Por que has dicho eso?

- Por que tu lo has preguntado

- No que  va, solo lo he pensado ni siquiera había abierto la boca

Me acerqué a él para comprobar si también le habían cambiado el color de los ojos y efectivamente así fue, les había pasado como a los míos ahora se iban volviendo amarillos

- Tus ojos, han cambiado- dijo mirándome fijamente

- También los tuyos- respondí absorta

Se levantó de la silla y me adelantó para salir a mi habitación y hablar con Daniel, pero justo cuando se puso delante mía me pareció ver que tenía una especie de tatuaje en la nuca, no pude distinguir muy bien el dibujo así que opté por preguntar

-¿Que llevas tatuado?

- ¿Disculpa?, yo no llevo ningún tatuaje

- Si que lo llevas, en la nuca- dije a la vez que me acercaba a él y le apartaba suavemente el pelo para poder contemplarlo mejor- llevas una A entrelazada a la K- rocé con las yemas de los dedos la zona que le había mencionado y enseguida hizo un gesto de dolor

- Déjame ver- dijo dándome la vuelta mientras me apartaba el pelo de la nuca- tu también llevas el mismo tatuaje

-¿QUE?

Fui corriendo hacia mi baño y allí cogí e espejo de mano y me situé con el pelo hacia el lado despaldas al espejo de la pared y entonces lo vi, tenía exactamente la misma marca que Alex. Salí disparada en busca de Daniel ya que me debía una explicación y como no lo encontré sentado en su despacho observando la puerta por la que yo acababa de entrar

- Los tatuajes no entraban en el trato, cuando mi madre lo vea me va a castigar de por vida, pero que digo me matará- dije prácticamente a gritos

- Kate cálmate- dijo muy tranquilo- esa marca como al igual que tus ojos nada más serán visibles para otras personas como vosotros, el resto de humanos os verán tal y como erais

- ¿Estás seguro?- pregunte ya mas tranquila

- Completamente, esos tatuajes están creados con el fin de conectaros, vayáis a donde vayáis el otro sentirá lo que vosotros sentís, penséis los que penséis el otro lo oirá, al igual que lo que veáis o si estáis en peligro, ahora os dejaré a solas para que os acostumbréis a vuestra nueva condición, si todo va bien mañana volveréis al mundo mortal

Dicho esto salió de la habitación y nos dejó solos. Yo me quedé mirando a Alex y este enseguida me devolvió a mirada. De pronto me sentí muy preocupada pero enseguida me di cuenta de que no era yo si no que estaba notando la preocupación de él.

- Deberías relajarte no tienes que estar nervioso

- ¿Y tu como lo...? a por lo que ha dicho Dani ¿no?

Yo no lo miré, ni siquiera le respondí ya que tenía la sensación de haber invadido su privacidad al sentir aquello, además también tenía mis propios problemas ya que si el podía oír mis pensamientos sabría todo lo que pensaba cuando estoy con el, o incluso a distancia

- No tienes de que preocuparte es algo a lo que nos tendremos que terminar acostumbrando

- ¿Cómo lo de leernos el pensamiento?

- Justo , no es algo que hayamos querido, lo hemos hecho por nuestros familiares y amigos

De pronto Daniel volvió a aparecer por la puerta con un deje divertido en su cara

- Se me había olvidado que vosotros nunca habéis oído hablar de los poderes de los Guardianes así que he vuelto para ayudar, lo primero que tenéis que saber es que poseéis prácticamente todos los poderes que podáis imaginar ya que vuestro cometido es ayudar a los humanos y debéis estar preparados para cualquier situación

- ¿Pero como utilizamos nuestros poderes exactamente?- dije intentando no parecer estúpida

- Es muy sencillo, lo único que tenéis que hacer es pensar en lo que queréis conseguir, venga quien quiere empezar

- Yo mismo, siempre que querido hacer una cosa

Y dicho esto Alejandro se acercó lentamente a la pared de su cuarto, cerró los ojos y extendió su mano hacia ella, de pronto esa se perdió en el cemento y enseguida reapareció

- ¿Has.. has atravesado la pared?

- Increíble

- Venga Kate, tienes que intentar algo lo que sea

Yo estaba súper nerviosa nunca había soñado con tener poderes ni nada por el estilo así que no se me ocurría nada, hasta que de pronto recordé lo que mi hermana decía "ojala tuviera rayos-x para poder copiar en los exámenes", in tenté concentrarme en poder ver atraves de los objetos... y de pronto centré la vista en Alex y empecé a reírme con todas mis ganas, Daniel y él se miraron extrañados más que eso casi pude oír como decían que estaba loca

- Me encantan los calzoncillos de patitos- dije entrecortadamente

Enseguida vi como Alejandro se ponía de un rojo muy intenso y se ocultaba un poco tras Dani
"Con la de cosas que puede hacer y elige verme la ropa interior" pensó

- Oye que mi intención no era ver tus modernos calzoncillos, solo he pensado en ver através de los objetos

- No me leas la mente

- Joder no puedo controlarlo

Sentí como la rabia me inundaba pero no podía ser yo, nunca me cabrearía por una cosa así por lo que no podía ser de otra persona

- Chico que tampoco es para enfadarse

Cada minuto que pasaba tenía la sensación de que había sido una idea horrible, no creía ni que duráramos dos días teniendo que convivir juntos 

2 comentarios:

  1. Me acabo de leer todos los capítulos del tirón. Es genial y muy original y sobretodo engancha. Escribe más prontooo!!

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    1. jajajaj me encanta tu comentario por fin alguien que lo ha leído si que quiero escribir mas pronto aunque a la gente parece que no le guste :( seguiré escribiendolo

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